La extracción de crudo en 2025 se mantendrá en los 516 millones de toneladas, el mismo nivel del año anterior, y en 2026 crecerá un 2 %, hasta los 525 millones de toneladas, ha asegurado el viceprimer ministro ruso, Alexandr Nóvak.
"Este año tendremos un nivel de extracción aproximadamente igual al de 2024, 516 millones de toneladas", ha afirmado en una entrevista a la televisión pública rusa.
Para el año venidero, ha destacado que Rusia "tiene previsto un crecimiento aproximado del 2 % en correspondencia con los pronósticos de desarrollo económico y social, se trata de 525 millones de toneladas".
Ha precisado que el Gobierno ruso orienta sus cálculos en un precio del barril de petróleo Brent de unos 69-70 dólares a medio plazo.
"Tratamos de mantener un enfoque conservador en cuanto a la valoración general de los precios del petróleo", ha reconocido.
A medio plazo, Rusia tiene previsto elevar la producción hasta los 540 millones de toneladas "y atenerse a estos niveles", ha subrayado. "Para esto, naturalmente, es muy importante continuar trabajando para crear las condiciones que garanticen este nivel de extracción", ha indicado.
Ha adelantado que "en estos momentos, nos preparamos para explotar las reservas de difícil acceso, en gran medida las de la plataforma continental ártica".
"Esto exige gastos adicionales y las correspondientes inversiones. Por eso continuaremos trabajando, entre otras cosas, en los preparativos y la creación de condiciones para estimular el flujo de inversiones en esta rama", ha detallado.
